Ayer nos acompañó en nuestra clásica “tertulia del jueves” Álvaro Pérez, delegado de la Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada. Vino equipado con un material audiovisual que nos dejó impactados en más de una ocasión. Álvaro vino a hablarnos de la labor de la fundación en la que colabora, así como para concienciarnos de la realidad tan dura en la que viven los cristianos en Oriente. No obstante, dejó clara una idea en cuanto comenzó el coloquio: “Esto no es un trabajo, es una labor. Por eso, viniendo aquí, me hacéis vosotros el favor a mí”.

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Primero nos explicó la situación política, bélica y religiosa actual: “El conflicto en Oriente Medio es un conflicto entre sunitas y chiitas. Los grupos radicales son de mayoría sunita”. Después nos habló de los cristianos que viven en esos países: “Los cristianos perseguidos nos están dando una verdadera lección de Fe”. Todos los cristianos que están en Oriente Medio (que son una minoría) sufren una persecución muy grave: ejercen violencia sobre ellos, los castigan, los secuestran y torturan, los separan de sus familias, e incluso los matan. Sin embargo, a pesar de estar sufriendo una persecución tan brutal, ellos mantienen la cabeza bien alta y actúan como verdaderos cristianos. Muchos de ellos dan su vida por Jesucristo, por el Evangelio, por sus creencias.

Para hacernos más conscientes de la realidad de estas personas, Álvaro nos expuso de algunos casos concretos (acompañando su explicación con videos y fotos): por ejemplo, la historia de Father Douglas. A este sacerdote lo secuestraron y torturaron. Después, cuando lo liberaron, dijo: “Tenemos que perdonar para que la gracia se transmita de generación en generación”. Otro de los casos fue el de la Hermana Guadalupe. Lleva cuatro años viviendo en Alepo (Siria): “Tenemos luz un par de horas al día”, “La gente sigue su vida normal, por la fe que tienen”.

 

 

 

 

 

 

 

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